5/07/2007

Un viaje en cole

El devenir estudiante de maestria me obliga a viajar en cole y subte, esperar, ajustar horarios y demases.

El viaje de ida lo hago leyendo, previo descanso mental del laburo -salir corriendo de un lugar a otro nunca es bueno, pero el que quiere celeste que le cueste, las cosas que me quedaron para la clase. Así, evito dormirme y pasarme -uno de mis terrores- y voy preparando la mente para que entre alguna idea.

El subte, siempre me resulto un medio hermoso para viajar salvo por los ruidos horripilantes. Por eso en general, desconecto y voy alienada.

El viaje de vuelta es todo un tema, vuelvo cansada, ya quiero llegar, etc, etc. Encima a veces me toca viajar parada, todo un bajón para quien lleva demasiadas hs. levantada y espera sentarse para relajarse un poco.
No obstante esos viajes parada se han tornado divertidos.
En algun punto me excitan. Me imagino cogiendo agarrada de las barandas, apoyada en los apoyabrazos. La luz ayuda y el movimiento es sincrónico con mi mente.
Se ha vuelto todo un viaje.

3 comentarios:

Lunita dijo...

pero... con quién cogés? eso te marca el tipo de viaje. :)

Aqui... dijo...

Si es cierto, los mejores con extraños del cole.

Lunita dijo...

jajjaja!!
en serio??? entonces tengo que probar!!!